Los gritos, amenazas y castigos son violencia. Son actos hostiles que ejercemos hacia los niños para que estos se comporten como nosotros queremos y necesitamos en momentos determinados.
Si no hacen lo que les pedimos o exigimos, les penalizamos con un castigo o reprimenda.
Nos enfocamos en lo que está bien y en lo que está mal, en “eres un niño bueno” porque haces lo que te digo o “eres malo” porque no obedeces y por ello te castigo.
Reflexionemos acerca de lo que pueden llegar a interiorizar lxs niñxs cuando les castigamos:
👉🏼me he portado mal
👉🏼hay algo mal en mí
👉🏼 merezco el castigo
👉🏼 soy culpable
👉🏼 los demás también merecen castigo cuando hacen cosas que no me gustan
Pregúntate:
🌀 ¿Cómo te gustaría que tu hijx se comportase con los demás?
🌀¿Te gustaría que se mostrase empoderado, amable, empática, compasiva…?
🌀¿Crees que castigándole, gritándole, amenazándole va a reforzar o a adquirir estas cualidades?
Aun así, la gran mayoría de nosotras venimos de infancias donde sí que hemos recibido este trato de nuestros cuidadores de referencia y a veces nos saltarán resortes y automáticos en los que nos sorprenderemos gritando, amenazando y/o castigando.
Educar sin gritos, amenazas ni castigos es posible. Será el título de la charla presencial gratuita que junto a @belen_imaz_ daré próximamente en Vitoria-Gasteiz👏🏼👏🏼👏🏼
¡Más info en próximos post!🥰
